Cuidar la salud y medio ambiente es otro de los beneficios de la dieta mediterránea. Debemos aumentar el consumo de frutas y verduras, sanas para nuestro corazón y disminuir el consumo de carne, sobretodo rojas, de esta forma conseguiremos no solo disminuir el riesgo de enfermedades, sino también el efecto negativo sobre el medio ambiente.